Leyenda de los volcanes
En el centro de México tenemos uno de los paisajes más surrealistas del país: dos volcanes majestuosos, uno al lado del otro, nevados en ciertas épocas del año. Así como la leyenda en la que ambos volcanes representan una pareja con un amor eterno, tuvimos la oportunidad de retratar el más inocente y profundo amor de Nicole y Nahum en su sesión preboda.
Como esta pareja radica en la CDMX y teníamos que llegar a los pies de los volcanes antes del amanecer, aceptaron nuestra invitación de quedarse a dormir en casa (en Puebla). Esa muestra de confianza y la plática tan cómoda que tuvimos, marcó el mejor comienzo.
Y así, todos despertamos alrededor de las 4am para emprender el camino al llamado “Paso de Cortés”, que es justo el punto intermedio entre ambos volcanes. Sabíamos que haría frío pero esa sensación era como la de 50 congeladores de verduras de Costco al mismo tiempo. Aunque nuestros dedos casi se quedaban pegados a las cámaras, la máxima motivación era verlos disfrutar como la pareja juguetona y cálida que son y guardar esos momentos tan únicos para siempre.
Después subimos a “La Joya”, el punto más bajo del Iztaccíhuatl, donde los alpinistas comienzan su camino a la cima. Nosotros sin embargo comenzamos el recorrido de la zona con unas deliciosas quesadillas y café de olla que vendían en una pequeña choza calentada con leña. Después de ese banquete ya ni el viento nos enfriaba.
Cuando la sesión de fotos para su “Save the date” terminó, y cuando el sol ya estaba sobre nosotros, sacamos la canasta con snacks para celebrar el éxito del día.
Así que novios, si están próximos a casarse:
1. Elijan siempre al fotógrafo (y a todos los proveedores para su boda) que les hagan sentir cómodos y con los que sientan confianza. Ese plus puede hacer que la experiencia sea aún más memorable y con mejores resultados.
2. Traten de disfrutarlo todo durante la planeación y el día de la boda, incluso si aparecen sorpresas e incomodidades. El matiz del día lo marcan ustedes, no las condiciones externas.
3. Así como en la vida, las mejores fotos son las que no se planean, así que olvídense de posar y sólo encárguense de disfrutarse uno al otro.
